¿Por qué es importante tener un espacio propio de trabajo?

A partir del inicio de la pandemia de COVID-19 se han desencadenado una serie de modificaciones y ajustes en la rutina de miles de personas alrededor del mundo que han obligado a generar un proceso de adaptación.

Dentro de todos los cambios se puede resaltar el pasar más tiempo en casa desarrollando actividades laborales (home office) y académicas, como el homeschooling; dichas actividades conllevan un ajuste en la dinámica en el hogar y en la distribución del espacio de cada individuo.

Al ser un lugar en donde se pasa un tiempo prolongado, la implementación de elementos que lo transformen en un entorno confortable, seguro y con identidad resulta esencial para el adecuado desenvolvimiento de las actividades correspondientes.

Por ejemplo, imaginemos un lugar de trabajo sucio, desorganizado, con poca luz, una alta temperatura y lleno de ruido, ¿cómo te resulta? ¿Consideras que podrías concentrarte en concluir todas tus labores? ¿Te resulta agradable?

Sea cual sea tu respuesta ante estos cuestionamientos, es importante destacar que cada uno de nosotros y cada una de nosotras va a implementar factores relacionados con sus necesidades propias y con sus gustos y/o intereses, es decir, ningún espacio va a ser igual a otro.

Por consiguiente, el establecer un espacio físico donde cada individuo pueda adicionar los aspectos antes mencionados permitirá que exista una mayor comodidad al desempeñar las tareas e impactará favorablemente en el estado de ánimo y el rendimiento, siendo este mayor. Retomemos el escenario descrito en el párrafo anterior, quizá las sensaciones que cause el imaginarse trabajando ahí no sean las más favorables y la motivación por completarlas se vea disminuida.

Ahora bien, si en casa no se cuenta con mucho espacio para dividirlo entre todas las personas que lo requieren, se puede repartir un mismo sitio entre dos o más individuos, pero permitiendo que cada división tengo elementos que la persona considere importantes o representativos de sí mismo/misma.

Así, cada uno/una de los/las integrantes se sentirá agusto en su espacio y con la capacidad e trabajar de forma cómoda y feliz en ese espacio, sentirá identificación.

Si tienes la fortuna de contar con diferentes espacios para cada uno de los/las integrantes, ¡qué genial!

Ahora, es importante respetar estos espacios. Si tus hijos/as deciden adornarlos/embellecerlos de forma personal, respétalos. Quizá no te guste, pero ellos/ellas están expresando su gusto personal, sus inquietudes. ¡Seré una buena forma de conocerles!

Incluso te puedes dar el gusto de poner esas cosas que siempre has querido y no habías encontrado el tiempo o el espacio.